S-6 FOTOBIOLOGÍA
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Fotocarcinomatosis cutánea en la altura

Marcial Ríos
Servicio de Dermatología. Hogar Clínica San Juan de Dios, Arequipa

Los datos estadísticos epidemiológicos revelan que la incidencia de las diferentes formas de cáncer de la piel se incrementa con las exposiciones a las radiaciones solares, especialmente los rayos ultravioletas B (RUV-B), cuyos efectos cancerígenos son influenciados por diversos factores como latitud, condiciones meteorológicas, altitud sobre el nivel del mar y características individuales como fototipo, patrones de comportamiento (empleo del tiempo libre), uso de productos fotosensibilizantes, trastornos metabólicos y genofotodermatosis.

Las mediciones realizadas han demostrado que la cantidad de RUV-B aumenta en 4% por cada 300 m de altura sobre el nivel del mar.

La observación efectuada en poblaciones de nativos del sur del país, que desarrollan sus actividades cotidianas en lugares por encima de los 4000 msnm., ha permitido constatar modificaciones tegumentarias causadas por las condiciones climatológicas imperantes en esos lugares, pero no presentan cáncer cutáneo en la proporción esperada por la cantidad de RUV-B que reciben, lo que probablemente se deba a mecanismos fisiológicos protectores desarrollados por generaciones que han producido un genotipo con cambios sistémicos y cutáneos que son verdaderas adaptaciones a la anoxia-anóxica propia de las regiones de gran altitud y que podrían participar en los procesos inmunológicos y de multiplicación y diferenciación celular de la epidermis y elementos dérmicos presentes en la carcinogénesis cutánea.

Fotobiología: prúrigo actínico

Merchan M, Zeas I, Quezada N, Ponce-Bernardo T.
Hospital Vicente Corral Moscoso. Facultad de Medicina. 
Universidad de Cuenca.

El prúrigo actínico, una fotodermatosis idiopática que, dentro de las dermatosis fotolumínicas en nuestro medio es el de más frecuente observación: 35% del total de pacientes con fotodermatosis que acuden al servicio de dermatología del Hospital Vicente Corrar Moscoso.

El 77,4% de los pacientes son mujeres y 22,6% varones. Aproximadamente un 50% de los pacientes la padecen en las dos primeras décadas de la vida. Se ha observado pacientes que, como única manifestación clínica, presentan compromiso del labio inferior o, en otros casos, conjuntivitis actínica.

La enfermedad la observamos con más frecuencia en pacientes de raza indígena y mestiza. Sin embargo, el número de casos entre la zona urbana y rural es prácticamente igual, probablemente explicado por el gran éxodo de campesinos hacia las ciudades.